Cómo estamos reduciendo nuestra huella de carbono

Desde que Patagonia tiene una oficina (y no solo vendía equipo desde la maleta del auto de Yvon), hemos dedicado espacio de nuestros escritorios, tiempo libre y un porcentaje de nuestras ventas, a proteger la naturaleza salvaje. Por nuestros viajes, sabíamos que nuestra tierra, el aire y el agua corrían peligro producto de la ceguera de quienes lucran con ellos.

Con los años también quedó claro que al hablar por los árboles, los ríos, el salmón y los grizzlies, no solo estábamos luchando por los lugares (y las criaturas) que amamos, sino también por todos. Ningún lugar está a salvo del sobrecalentamiento atmosférico y pronto las vidas que salvemos pueden ser las nuestras. La crisis climática es un problema de la humanidad.

La ciencia es clara al afirmar que la causa principal de la crisis climática es un exceso de dióxido de carbono y otros gases que atrapan el calor en la atmósfera y, sinceramente, nuestro negocio está profundamente implicado. Desde hilos de poliéster a base de petróleo y telas tejidas en máquinas a carbón, hasta tratamientos de impermeabilización y despacho de ropa en bolsas de plástico, estamos hasta la cabeza en emisiones de carbono. Muchos de nosotros todavía manejamos automóviles para ir a trabajar y viajamos en avión. Hay mucho que cambiar, pero estamos trabajando duro para hacerlo. Nos hemos puesto un objetivo ambicioso, pero realista, de alcanzar la carbono neutralidad para 2025 en todo nuestro negocio, incluida nuestra cadena de suministro.

Cadena de suministro es el término que usan los fabricantes de textiles y otros productos para describir todo, desde los cultivos para producir fibras hasta el ensamblado de telas para hacer prendas de vestir y el despacho de la ropa terminada a bodegas, tiendas y, finalmente, a tu casa. La cadena de suministro de Patagonia representa el 97% de nuestras emisiones de carbono.

Cuando decimos que seremos “carbono neutrales” (“cero neto” es otro término que escucharás), significa que eliminaremos, capturaremos o mitigaremos todas las emisiones de carbono que creemos, incluidas las de las fábricas donde hacen nuestros textiles y ropa terminada, así como las de las granjas que cultivan nuestras fibras naturales. Esa última parte es crucial. Existe una percepción errada muy común de que gran parte, o la mayoría, de nuestra contaminación por carbono proviene del transporte. De hecho, el 86% de nuestras emisiones (todas menos el 11% del 97%) provienen de las materias primas que utilizamos y sus cadenas de suministro, que es el motivo por el que estamos tan enfocados en el reciclaje (más sobre este tema en un momento). Nuestro objetivo real es convertirnos en “carbono positivos”, lo que significa que eliminamos más carbono de la atmósfera de lo que emitimos, incluso a medida que nuestra empresa crece.

Es un gran objetivo, pero no hemos hecho mucho ruido al respecto porque, bueno, será algo muy difícil de lograr y preferimos hablar sobre cosas que realmente hemos hecho.

Entonces, veamos más de cerca lo que estamos haciendo para llegar ahí.

• Utilizaremos solo electricidad renovable para nuestras tiendas minoristas de Patagonia, centros de distribución, oficinas regionales y globales y oficinas centrales para 2020. A partir de ahora, estamos al 100% de electricidad renovable en los EE. UU. y 76% a nivel mundial.
• Reduciremos el uso de energía en toda nuestra cadena de suministro, trabajaremos con proveedores para convertirlos a energía renovable e invertiremos en proyectos de energía renovable para cubrir el resto de nuestra huella de carbono. A veces, esto es tan fácil como pedirle a un socio que se convierta. Otras veces, es súper complicado e involucra infraestructura local, múltiples actores y política.
• Utilizaremos solo materiales renovables o reciclados en nuestros productos para 2025. ¿Recuerdas cómo dijimos que la mayoría de nuestras emisiones provienen de materiales vírgenes? Esto es importante. Si bien el uso de fibras recicladas no elimina las emisiones de carbono, las reduce entre un 44 y un 80% (según el tipo de fibra). Si tienes en cuenta todo lo que se necesita para hacer una prenda, la reducción del impacto es menos impresionante (10-20% por artículo), pero ahí es donde vemos un potencial real. Mientras tanto, la conversión a materiales renovables y reciclados reduce el uso de agua y mantiene el plástico lejos de los vertederos y los océanos. A partir del otoño 2019, el 69% de nuestra línea incluye material reciclado.

• Aumentaremos nuestro programa Worn Wear® y lo convertiremos en una unidad comercial sólida que respalde diversas iniciativas que fomenten la reutilización, reparación y reciclaje para extender la vida útil de los productos y reducir su huella ambiental. Solo nueve meses más de uso reducen la huella de carbono de una prenda en un 30%.
• Estamos invirtiendo en agricultura orgánica regenerativa como fuente de materias primas para nuestra indumentaria y alimentos para Patagonia Provisions. Regenerativo es un término pegajoso para un grupo de prácticas agrícolas, como lo orgánico, el compost, poco o nada de labranza, la rotación de cultivos, los cultivos de cobertura y los cultivos intercalados, que han demostrado tener muchos beneficios pero que ante todo promueven la creación de una capa superior del suelo saludable. Estas técnicas también han demostrado ser prometedoras para atraer más carbono al suelo y almacenarlo mejor que otros métodos de cultivo. Por lo tanto, las estamos probando y trabajando con otros para desarrollar una Certificación Orgánica Regenerativa que ayude a informar a las personas sobre productos que tienen el potencial no solo de hacer menos daño, sino de entregar más beneficios.
• Invertiremos en otros proyectos de captura de carbono, como la reforestación, en todo el mundo.

Como compañía, Patagonia está haciendo mucho más sobre la crisis climática, incluido el apoyar a jóvenes activistas climáticos durante la Semana del Clima 2019.

En 2018, cambiamos la declaración de nuestra misión de empresa: “Estamos en este negocio para salvar nuestro hogar, el planeta Tierra”. Y estamos encarnando esa misión en nuestro marketing y nuestras comunicaciones, también con nuestros documentales e invirtiendo en negocios a través de Tin Shed Ventures. Por ejemplo, hemos invertido en Wild Idea Buffalo Company, un rancho en Dakota del Sur cuyos búfalos están ayudando a restaurar el ecosistema de las Grandes Llanuras y mantener más carbono en el suelo. Felizmente, Wild Idea ahora suministra el delicioso jerky de búfalo que vende Patagonia Provisions: una relación win-win.

Desde que le dimos un escritorio y un cheque a un estudiante de posgrado que trabajaba para restaurar el río Ventura en 1973, hemos donado más de 105 millones de dólares a organizaciones ambientales de base. Muchas de ellas están concentrando sus esfuerzos en el clima y en la creación de resiliencia. (Puedes encontrar un grupo cerca tuyo para apoyar u ofrecerte como voluntario en Patagonia Action Works, nuestra red social para activistas).

La crisis climática es enorme, complicada y a menudo abrumadora, por lo que es importante ver el progreso. Nosotros lo hacemos. Estamos viendo reducciones de carbono en nuestra cadena de suministro y estamos viendo grandes victorias de los activistas que apoyamos.

Cuando Mark Capelli ocupó ese escritorio en nuestras oficinas, el río Ventura estaba tan mermado que algunos le dijeron que sus esfuerzos serían inútiles. Hoy en día, no es perfecto, pero aún fluye, y más limpio, hacia el Pacífico