En Qué se Parecen un Colapso en la Carretera y un Viaje a Marte
Primera Regla de un viaje por carretera: Tu vehículo puede colapsar. Segunda Regla de un viaje por carretera: Tú puedes colapsar con él.
Cerca de las Ruby Mountains, en Nevada, Gordon y Meredith Wiltsie daban la pelea entre llaves inglesas y cables luego de que el silenciador de su International Travelall se soltara. Mientras Nick, su hijo de 4 años, golpeaba rocas con un martillo a un lado del camino, Meredith se sentó junto al vehículo descompuesto y se cubrió el rostro con la mano llena de grasa. Gordon tomó una foto, que luego aparecería en el catálogo de Primavera 1993 de Patagonia. (Justo fuera del cuadro estaba Ben, el hermano mayor de Nick, saltado de un lado a otro sobre el techo del auto).
“Hasta cierto punto, es bien emblemático de mi niñez que mi mamá estuviera colapsando estrepitosamente y mi papá, por supuesto, capturara el momento con su cámara”, dice Nick, ahora con 30 años, con una carcajada. “Especialmente cuando algo estaba saliendo muy mal”. Nick describe a sus padres como un par de aventureros perpetuos que se conocieron en un viaje de esquí en la universidad y pasaron su luna de miel en Bangladesh. Los periplos continuaron a medida que su familia crecía, con innumerables viajes para acampar y escalar en lugares lejanos.
En cuanto a Nick, los vehículos y las rocas aún son su especialidad, aunque sus viajes ahora son exponencialmente más remotos. Como ingeniero mecánico para el programa Mars rover del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en Pasadena, su labor es ayudar a planificar los movimientos del Curiosity rover. Además está desarrollando el software de control en tierra para el nuevo Mars rover 2020, que se lanzará este año.
“Básicamente, trabajo en cómo mantener a salvo a los rovers mientras están moviéndose en su exploración de la superficie de Marte”, explica. “Una de las cosas que de verdad me gusta de este trabajo es que si algo sale mal a menudo se trata de algo nuevo y tenemos la posibilidad de descubrir cómo solucionar ese problema por primera vez. Con el Curiosity, ese algo fue el taladro en su brazo robótico. Se quebró hace como un año y medio, y me ha tocado estar involucrado en cómo repararlo. ¿Cómo trabajas para reparar un robot que está a billones de años luz? Eso es lo que me encanta”.
Tercera Regla de un viaje por carretera: Abraza lo inesperado.